El retraso del crecimiento y desarrollo en niños menores de cinco años es un indicador de desnutrición infantil, por lo que el Ministerio de Salud (Minsa) exhortó a las madres llevar periódicamente a sus hijos al establecimiento de salud de su localidad que cuente con el Programa de Crecimiento y Desarrollo (CRED) donde serán medidos, pesados y evaluados en su desarrollo psicomotor.
Rosa Vilca Bengoa, responsable de la Etapa Niño de la Dirección General de Salud de las Personas (DGSP) del Minsa, destacó que el CRED busca promover la salud integral de los niños, para que tengan cada vez más autoestima, estén sanos, y sean autónomos, creativos, solidarios y felices. También ofrece orientación general en el acompañamiento efectivo a los niños y a sus padres.
Señaló que este programa es importante, sobre todo porque detecta a tiempo enfermedades que pueden afectar el normal crecimiento y desarrollo del niño, sirve además para educar y orientar a los padres sobre los cuidados, estimulación temprana y afectividad, así como también motiva que los padres se interesen y quieran más a sus hijos.
“El programa permite conocer el estado físico y emocional, así como observar cómo se relacionan con otros niños de su edad”, refirió la especialista.
Agregó que el niño debe crecer y desarrollarse de manera integral con sus necesidades físicas, emocionales e intelectuales, las que deben estar relacionadas entre sí, pues dependen unas de otras para que el cerebro pueda desarrollarse en forma óptima.
“El adecuado cuidado del niño es un proceso que posibilitará su preparación para lograr el éxito en la etapa escolar y posteriormente a ella, con una vida productiva y saludable, su supervivencia, crecimiento y desarrollo, así como la mejora de sus oportunidades”, enfatizó.
Indicó que los cuidados del niño implican una buena nutrición y salud, así como una adecuada higiene, ambientes saludables, estimulación psicosocial, protección y seguridad emocional.
Calidad de vida
Vilca Bengoa refirió que los cuidados de la primera infancia son un aspecto crítico en la estrategia de lucha contra la pobreza y la desnutrición, a fin de romper los ciclos que se van sucediendo de una generación a otra, y que lamentablemente mantienen a las personas en condiciones crónicas de salud deficiente y desarrollo humano sub óptimo.
“Los niños y niñas con retraso del crecimiento no son capaces de ingerir, retener o utilizar las calorías necesarias para ganar peso y no crecen como se espera”, advirtió la especialista.
En tal sentido enfatizó que al intervenir precozmente en cada una de las áreas bio- psicosociales con la visión de "Niño Saludable", el Minsa contribuye a mejorar los niveles y calidad de vida no sólo de la población infantil en riesgo, sino también del país. Fuente: ANDINA
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